30 invitados: Así fue el funeral privado del Príncipe Felipe, Duque de Edimburgo

La ceremonia se transmitió por televisión y el país guardó a esa hora un minuto de silencio. Tuvo un carácter excepcionalmente íntimo, muy alejado del funeral de Estado que se habría oficiado en otras condiciones.

0
455

Respetando su últimos deseos y siguiendo el protocolo, así fue enterrado este sábado el príncipe Felipe, Duque de Edimburgo en St. George’s Chapel del castillo de Windsor, a unos 50 kilómetros al oeste de Londres, funeral al que solo asistieron 30 personas debido a la pandemia del covid-19, en su mayoría familiares cercanos.

El funeral tuvo un carácter excepcionalmente íntimo, muy alejado del funeral de Estado que se habría oficiado en otras condiciones.

Los responsables de oficiar el funeral privado fueron el arzobispo de Canterbury, Justin Welby, y el decano de Windsor, David Conner.

Debido a las medidas de seguridad la Reina Isabell se sentó sola durante la ceremonia que fue transmitida por televisión y el país guardó a esa hora un minuto de silencio.

El féretro del príncipe estaba cubierto por su estandarte personal y fue conducido desde la entrada principal del castillo de Windsor hasta la escalera de la capilla en un Land Rover que, curiosamente, fue diseñado por el duque.

Tras guardar un minuto de silencio, el ataúd fue portado por ocho militares hasta el interior de la capilla, un homenaje que se rinde a Felipe, quien dejó la carrera militar al contraer matrimonio con la monarca británica.

Le seguía una pequeña procesión a pie en la que primó la distancia social y en la que participaron el príncipe Carlos y su hermana, la princesa Ana, que llevaron el ataúd del duque a la iglesia. El viaje por el interior del castillo duró unos ocho minutos.

También estaban sus hermanos, Eduardo y Andrés. Willian y Harry seguían después junto a su primo Peter Phillips. Detrás de ellos estuvieron los últimos miembros de alto rango de la familia real británica, el esposo de Anne, el vicealmirante Tim Laurence, y el conde de Snowdon, hijo de la princesa Margarita.

Por su parte los miembros de la realeza que no participaron en la procesión, como la duquesa de Cornualles, Camila Parker Bowles, y la duquesa de Cambridge, Kate Middleton, se unieron a la monarca de 94 años para ver el desfile fúnebre. Esto también incluyó a los parientes directos del lado del duque que estuvieron presentes, incluidos los sobrinos nietos de Felipe, el príncipe heredero de Baden y el príncipe de Hohenlohe-Langenburg.