Cuidado con la sextorsión, la forma de chantajear a jóvenes para que realicen actos sexuales

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La mayoría de los adolescentes en la actualidad usan Facebook, Instagram, Twitter y Snapchat. En cada una de sus redes sociales desde el inicio van cultivando cuidadosamente su identidad digital casi el mismo tiempo con el que construyen su identidad en la vida real.

Es importante que se familiaricen con la palabra “sextorsión” que es una forma del explotación sexual en la cual una persona es chantajeada con una imagen o vídeo de sí misma desnuda o realizando actos sexuales, que generalmente ha sido previamente compartida mediante a través de plataformas digitales, como teléfonos celulares.

De repente, un día, recibes un mensaje enviado por un desconocido. “He hackeado tu Facebook. Si no me enseñas las senos voy a poner esta imagen como tu foto de perfil, es una imagen la que apareces desnuda”.

 “Una foto que habías ocultado en tu celular y que pensabas que nadie conocía excepto tú. Y  ahora yo, tienes 15 minutos para enseñar todo, sino todo mundo te vera”.

“Te dejaré en paz cuando me mandes la foto”. El sujeto insiste y no te deja en paz, incluso te amenaza con que cuenta con más material. Cada vez las exigencias son más denigrantes. Sabe tu dirección y un día llega a tu casa un paquete con un juguete sexual y un lubricante.

Hackea tu email, finge ser tú y engaña a tus amigas del mismo modo. Esto continúa durante días, después semanas, meses. Finalmente, resulta que has estado produciendo pornografía para un desconocido durante años.

Lo anterior son declaraciones textuales de un sujeto de 23 años que fue condenado a ocho años de prisión acusado de sextorsión o agresión sexual a distancia.

El hombre pasó varios años amenazando a jóvenes para que se realizaran fotos y videos pornográficos

Una abogada de del departamento de Justicia de Estados Unidos (EUA) explicó que “es como si alguien permaneciera frente a su víctima con un bate de béisbol y la amenazara con golpearla si no se quita la ropa y le deja fotografiarla desnuda. Es obligar a otra persona a realizar actos sexuales”.

De acuerdo con lo explicado por la abogada, varias víctimas han confirmado que ese tipo de acoso las ha llevado a cambiar su forma de vida, otras tienen miedos, ansiedad y hasta trastornos para dormir o relacionarse con otros jóvenes de su misma edad.

Para los expertos hay una clara diferencia entre sextorsión y porno vengativo, en la sextorsión se coacciona a la víctima para que realice actos sexuales contra su voluntad y el delincuente a menudo emplea fotos privadas robadas como material para el chantaje.

“Creo que existe otra diferencia muy importante entre el porno de venganza y la sextorsión”, afirma Benjamin Wittes, de la Brookings Institution.

Según Wittes, la sextorsión se produce cuando “la actividad sexual en sí no es consentida y se realiza bajo coacción”. El porno de venganza, es material creado de forma consentida que maliciosamente se filtra sin el consentimiento de uno de los participantes.

Más allá de los sistemas de software y las aplicaciones para preservar la intimidad, que cada vez son más frecuentes, lo expertos dicen que uno de los mayores problemas es que todavía hay reticencia a reconocer la sextorsión como lo que es.

Carrie Goldberg abogada en Nueva York y antigua víctima de porno de venganza ahora dirige su propio bufete especializado en delitos en los que convergen el sexo, la coacción e internet.

Menciona que cuando las víctimas acuden a ella, están traumatizadas y no están seguras siquiera de que se haya cometido un delito contra ellas.

Según Goldberg, la mayoría de víctimas que atiende son menores de edad cuyos sextorsionadores también son menores.