El Salvador _Ser diagnosticada con cáncer de seno es una de las situaciones más difíciles por las que una mujer puede atravesar. Además del desgaste físico que representa la enfermedad, las pacientes que lo padecen, deben enfrentar la posibilidad de que uno o ambos senos sean removidos, lo que conlleva a afectaciones psicológicas.
Con el propósito de apoyar a las mujeres que se enfrentan a una cirugía de extracción de las glándulas mamarias, existen prótesis externas de mama con el fin de mejorar el aspecto físico y la seguridad de las pacientes.
El Instituto Tecnológico “Escuela Técnica para la Salud” de San Salvador otorga prótesis de seno artesanales a sobrevivientes de la enfermedad, una obra humanitaria que inició en el año 2010 con Juan Oseguera, fundador de la Asociación Salvadoreña Vida y Esperanza, quien falleció en 2020.
La médico del Instituto, Michelle Molina, explicó que la escuela aún cuenta con un aproximado de 80 prótesis que creó el señor Osegueda, sin embargo buscan crear sus propias prótesis a fin de beneficiar a las pacientes que llegan al Instituto.
“Queremos hacer un taller con los alumnos de servicio social para que ellos puedan aprender a hacer prótesis, por el momento tenemos de las que hizo el señor Osegueda, pero recordemos que cada pecho es diferente y nosotros buscamos que toda mujer que busque ayuda le podamos brindar una prótesis de acuerdo a su tamaño”, indicó Molina.
La mastectomía consta de una cirugía donde se extirpa todo el tejido mamario para evitar la propagación del cáncer de mama.
La doctora Molina comentó que para una sobreviviente de cáncer de mama, una prótesis brinda un apoyo en la apariencia en la imagen que se proyecta hacia otras personas, ya que afirmó aún existe una mala percepción de la enfermedad que afecta a su autoestima.
“Lamentablemente, en la sociedad aquí es bien difícil que uno mira a alguien que no tiene un pecho y la gente comenta de eso, y se juzga demasiado, y con ello las pacientes entran en depresión”, sostuvo Molina.
El psicooncólogo, Jorge Molina, aseguró que someterse a una extracción de seno cuando se padece de cáncer es un trauma para el cuerpo, no obstante, enfatizó la importancia de contar con espacios de ayuda y promover el apoyo social.
“Una cosa que tiene mucho impacto positivo es cuando una mujer se agrupa con otras porque hay una fuerza muy grande en el ‘yo tambien’, ‘yo también pase por eso’, ‘yo tambien lo vivi’, el ‘yo también’ tiene un impacto muy grande”.
Actualmente, en El Salvador, el cáncer de mama es uno de los principales cánceres con mayor mortalidad, por ello, se hace el llamado a las mujeres a que se realicen los exámenes correspondientes para detectar la enfermedad.
“La clave de la enfermedad es consultar a tiempo, porque si una mujer se hace el autoexamen, se conoce, siente algo en su cuerpo y consulta, entonces ahí estamos a tiempo”, recomendó la médico Molina.
La Asociación Salvadoreña para la Prevención de Cáncer estima que el 60 % de las mujeres diagnosticadas con cáncer de mama se descubren en etapas avanzadas.
