El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, declaró el estado emergencia este martes en diez provincias tras e terremoto que ya dejó más de cinco mil muertos.
La medida se ha establecido por un periodo de tres meses en diez localidades del sureste del país, que fueron mayormente afectadas por el devastador sismo.
“Decidimos declarar el estado de emergencia para asegurar que nuestro trabajo [de rescate] se pueda llevar a cabo de manera rápida”, dijo Erdogan.
En este momento los rescatistas continúan la luchan contra el tiempo para hallar a las personas atrapadas entre los escombros. Según los informes, hasta el momento más de 8.000 personas han sido “desenterradas” por el personal de emergencia y los voluntarios.
Además, se reportan más de 5.600 edificios colapsados, incluyendo varios inmuebles residenciales donde la mayoría de los ocupantes dormía a la hora del sismo principal.
Según estimaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS), el potente terremoto que mató a miles de personas en el sudeste de Turquía y el norte de Siria podría afectar a 23 millones de personas en esas regiones.
