El astronauta de origen salvadoreño Frank Rubio compartió un mensaje para la comunidad latina, en el primer mes en la Estación Espacial Internacional (EEI).
En una conversación en directo y en español con Diana Trujillo, directora de vuelo de la NASA, Rubio contó que todavía se está acostumbrando al espacio, y aunque el primer día fue el más difícil, desde el primer momento fue muy agradable porque se encontró con dos de sus compañeros.
“Fue una gran cosa tener a mis compañeros astronautas y cosmonautas que ya estaban acá, lo más feliz fue saludarlos a ellos”, explicó Rubio.
Frank inició su viaje el pasado 21 de septiembre para una misión de seis meses en el espacio como ingeniero de vuelo y miembro de la tripulación de la Expedición 68.
Su trabajo según comentó es sobretodo “mucho mantenimiento”. “La EEI tiene casi veinte años, tuvimos que arreglar la plomería, la electricidad y mantener estancia. Pero lo más importante es la ciencia. Ahora en día estamos trabajando con plantas, ver cómo podemos crecer plantas en el espacio para aumentar nuestra comida para la Luna y Marte, siempre ayuda mucho tener comida fresca”.
La comida no es tan rica en el espacio, pero estar allá es un sueño hecho realidad
Según Rubio, la comida en el espacio “no es tan rica” porque no tiene el sazón de cómo cuando es preparada en casa, y tampoco es fresca.
“La comida no es tan rica porque tiene que ser preparada para llegar al espacio, entonces no es tan fresca y no tiene el sazón que tenemos en la casa, pero más que todo disfrutamos el tiempo juntos, es mi parte favorita del día… Cenamos juntos, tenemos de media hora a una hora juntos, es como estar en casa” relató.
Aún así, el astronauta manifestó que estar en la EEI “es como un sueño realizado”.
“Los latinos hemos hecho muchas grandes cosas. Ser una pequeña parte de eso más que todo me siento orgulloso, saber que si Dios quiere, podemos ayudar a la juventud latina a que sigan haciendo cosas aún más grandes en el futuro”, dijo Rubio desde el espacio.
Asimismo, expresó que es un orgullo representar al país de sus padres: El Salvador y cree que en el futuro más jóvenes tendrán oportunidad de hacer cosas más grandes.
“Para mi es un gran orgullo, un gran honor representar a nuestra comunidad, especialmente el país de mis padres: El Salvador. Saben el segundo día que estuve en la estación pude ver El Salvador desde la ventana y fue algo muy emocionante sabiendo las historias que mi familia tiene. La realidad es que hay muchos hispanos que hacen grandes cosas en muchas partes del planeta: en los deportes, en la ciencia, entretenimiento, entonces yo creo que todos nosotros hemos tenido estas oportunidades y es importante ayudar a la juventud latina, saber que ellos si pueden y que van a hacer hasta cosas más grandes en el futuro y para mi eso es lo más importante.
