Premios Oscar 2022: ¿Quiénes son los favoritos?

0
651

La 93ª ceremonia de los premios Oscar esá por llegar. Por eso, aquí te presentamos un repaso a las 23 candidaturas y a sus posibles ganadores según la temporada previa de premios.

Veremos si se cumplen los vaticinios.

MEJOR PELÍCULA. CODA, de Sian Heder. Se le escaparon el Bafta británico y el Critics Choice, que quedaron a manos de El poder del perro, de Jane Campion. Este premio es poco revelador, pero lucha por hacerse con el hueco de los Globos de Oro y se entregó dentro del periodo de votación de los Oscar. A cambio CODA se llevó el premio principal, el de mejor reparto, en los galardones del Sindicato de Actores (SAG) y el del Sindicato de Productores (PGA). Desde 2009, solo tres películas han ganado el PGA y no el Oscar a mejor filme. Y la carrera de CODA se parece a la de Green Book, que en 2018 se llevó el premio principal: película buenrollista pensada para el gran público con cierto mensaje social. Solo hay un posible detalle en contra. La Academia ya está muy cerca de los 10.000 miembros, gracias a un incremento exponencial de las invitaciones. Y una cuarta parte reside fuera de EE UU. Se les considera votantes activos, y fueron ellos los que empujaron a Parásitos (2020) y Nomadland (2021). El poder del perro ganó el Bafta, y es más apreciada fuera de EE UU que dentro. En el premio final de la noche veremos hacia dónde se desequilibra la balanza. Ahora bien, si gana CODA será, increíble, la primera película triunfadora en Sundance que se lleve el Oscar principal. Cosas locas del cine indie. Ah, y no será el primer remake que gane el Oscar a mejor película (Ben-Hur, Infiltrados…). Abro otro melón: para mí es mejor CODA que la original francesa, La familia Bélier. El sistema actual de votación favorece a CODA; El poder del perro es una película que amas u odias, mientras que el drama de Heder logra caer bien y ocupará segundas y terceras posiciones en los votos de quienes primen al wéstern de Campion. Un último detalle: Apple TV compró CODA en Sundance. Si gana este filme, Netflix seguirá sin lograr su ansiado Oscar a mejor película, y la primera plataforma en lograrlo sería Apple TV. Eso va a doler.

MEJOR DIRECCIÓN. Este no se le escapa a Jane Campion con El poder del perro, la primera cineasta que ha sido dos veces candidata en esta categoría. Lo ha ganado todo, incluido el galardón del Sindicato de Directores (DGA). Será la tercera directora en ganar esta estatuilla, tras Kathryn Bigelow y Chloé Zhao. Heder no es ni candidata, algo tampoco extraño: por ejemplo, Argo ganó mejor película sin tener a Ben Affleck finalista en dirección.

MEJOR ACTOR. Will Smith, por El método Williams. Lo ha ganado todo: el Globo de Oro, el del SAG, el Critics Choice y, atentos, el Bafta. El año pasado, el Oscar parecía para el fallecido Chadwick Boseman… Pero volvemos al peso de los votantes de fuera de EE UU: el Oscar se lo llevó Anthony Hopkins (El padre), que estaba felizmente durmiendo en un viaje por su Gales natal, y que previamente había obtenido el Bafta (de ahí la importancia del triunfo de Smith en los galardones británicos). Solo por esos votantes le daremos una cierta posibilidad a Benedict Cumberbatch (El poder del perro). Y el sorpresón lo daría Andrew Garfield (tick, tick… Boom!), que en EE UU tiene sus seguidores. Pero vamos, el campañón pro-Oscar lo ha hecho Smith.

MEJOR ACTRIZ. En esta edición el cuarteto de premios a la mejor interpretación no alberga muchos alicientes. A Jessica Chastain se lo deben desde La noche más oscura (ganó en aquella edición Jennifer Lawrence), y este año lo ha ganado todo, desde que se llevó la Concha de Plata a mejor actriz en San Sebastián, y ha hecho campañón. Una curiosidad: ni ella ni ninguna de sus rivales fueron candidatas al Bafta, con lo que ahí nadie suma ni resta. El Globo de Oro lo ganó Nicole Kidman, pero a estas alturas…

MEJOR ACTOR SECUNDARIO. Tampoco hay batalla: Troy Kotsur, por CODA. Será el segundo actor sordo que lo gane… tras Marlee Matlin, su compañera en CODA, que lo logró con Hijos de un dios menor. Kotsur no obtuvo el Globo de Oro, aunque en esta edición eso importa poco. Se ha llevado hasta el galardón a mejor secundario de los Independent Spirit. En cada gala ha realizado un emocionante discurso de agradecimiento. Para muy fans: recuperad el episodio Silent Night, de CSI: Nueva York, porque en él ya hicieron de matrimonio Kotsur y Matlin.

MEJOR ACTRIZ SECUNDARIA. Otra estatuilla cantada. Para Ariana DeBose, por West Side Story. Con su trabajo como Anita ella sí ha ganado todos los premios principales. Ojalá se lo entregue Rita Moreno, que por su Anita en la versión de 1961 ganó este Oscar.

MEJOR GUION ORIGINAL. Aquí hay batalla. Apostaremos por Paul Thomas Anderson, por su libreto de Licorice Pizza. Sería el homenaje a una gran película, y ganó el Bafta de su categoría. Pero el Sindicato de Guionistas le dio su premio a No mires arriba, y el Globo de Oro en este apartado fue para Belfast, de Kenneth Branagh, que también se llevó el Critics Choice. Con todo, Licorice Pizza.

MEJOR GUION ADAPTADO. Si al principio de la temporada esta estatuilla parecía claramente para Jane Campion, que en El poder del perro ha quitado los primeros capítulos de la novela para centrarse en la trama en el rancho, ahora diría que es para Sian Heder por CODA. Y eso que en este apartado la labor más compleja la ha realizado Ryûsuke Hamaguchi en Drive My Car, con los dos cuentos de Murakami. El Bafta y el premio del Sindicato de Escritores han sido para CODA, el Critics Choice para El poder del perro.

MEJOR PELÍCULA INTERNACIONAL. Drive My Car, de Ryûsuke Hamaguchi. La japonesa ya tenía que haber ganado la Palma de Oro en Cannes (se llevó guion y el Fipresci de la crítica), y se le escapó… Esta será la estatuilla que obtenga de sus cuatro candidaturas. El resto son estupendas, y la danesa Flee ha logrado un hecho histórico: ser candidata a película internacional, documental y largo de animación. Da igual: es el año Hamaguchi.

MEJOR LARGO DE ANIMACIÓN. Encanto, de Jared Bush, Charise Castro Smith y Byron Howard. Por la inercia de los votantes, ya que ha ganado el Globo de Oro, el PGA y el Bafta. Ahora bien, el Annie (los galardones de los animadores) y el Critics Choice lo obtuvo Los Mitchell contra las máquinas. Realismo mágico frente a la guerra contra el imperio virtual. A imaginación gana Los Mitchell contra las máquinas. En los Oscar…

MEJOR LARGO DOCUMENTAL. Summer of Soul, de Questlove. Otra película que lo ha ganado todo en la temporada de premios, empezando hace ya en enero de 2021 por el premio del público en su categoría en Sundance. Y quien lo haya querido ver lo ha tenido disponible en Disney +.

MEJOR FOTOGRAFÍA. Greig Fraser, por Dune: parte uno. El Bafta y el galardón de la American Society of Cinematographers fueron para él; el Critics Choice (que aquí no suma) lo obtuvo Ari Wegner, por El poder del perro. El año pasado fallé apostando por Joshua James Richards, el director de fotografía de Nomadland, que ganó todos los premios… menos el que otorga la American Society of Cinematographers, que se lo llevó Erik Messerschmidt por Mank. El Oscar fue para Mank. Este año no parece que haya dudas.

MEJOR BANDA SONORA. Dune: parte uno, de Hans Zimmer. El alemán solo ha ganado un Oscar en su carrera (¡por El rey león!) y Hollywood parece volcado en darle el segundo. No se le ha escapado un galardón en la temporada previa. Eso sí, no será ni el segundo en las apuestas, pero quien de verdad se lo merece es Alberto Iglesias con Madres paralelas. Dicho queda.

MEJOR CANCIÓN. Dos oruguitas, de Lin-Manuel Miranda para Encanto, cantada por Sebastián Yatra. Pero este puede ser un premio destrozaquinielas. Primero, Disney no ha enviado la canción estrella de Encanto (es No se habla de Bruno, que por cierto sí se interpretará en la gala). Segundo, porque Billie Ellish está con No Time To Die para el último James Bond de Daniel Craig, y ha ganado el Grammy, el Globo de Oro y el Critics Choice. Tercero, porque Diane Warren va ya por su decimotercera candidatura, esta vez por Cuatro días. Y cuarto, los otros rivales que faltan son Beyoncé (El método Williams) y Van Morrison (Belfast). Uff.

MEJOR DISEÑO DE PRODUCCIÓN. Dune; parte uno, trabajo de Patricia Vermette (diseño de producción, su tercera candidatura) y Zsuzsanna Sipos (decorados, primera vez en los Oscar). Han ganado el Bafta, el Critics Choice el galardón del Sindicato de Directores de Arte y la Set Decorators Society of America en el apartado película de ciencia ficción. Los otros cuatro candidatos han hecho una gran labor, aunque volvemos al concepto “inercia del votante”.

MEJOR DISEÑO DE VESTUARIO. Jenny Beavan, por Cruella. Trabajo fascinante en una película marcada por la moda. Sería el tercer Oscar para Beavan, que lo ha ganado con dos trabajos tan eclécticos como Mad Max: Fury Road y Una habitación con vistas. Con Cruella ha ganado el Bafta, el Critics Choice y el premio para película de época del Sindicato de Diseñadores de Vestuario.

MEJOR MAQUILLAJE Y PELUQUERÍA. Otra que parece clara. En los Bafta y los Critics Choice ganaron Linda Dowds, Stephanie Ingram y Justin Raleigh, por Los ojos de Tammy Faye. Pero en los galardones del Sindicato de Hollywood de maquilladores y peluqueros no ganaron ni en peluquería ni en maquillaje de película histórica. Tampoco es que me mate este trabajo. La carta en la manga para gente que le vaya el riesgo: Cruella, labor de Nadia Stacey, Naomi Donne y Julia Vernon.

MEJOR MONTAJE. Este es el premio más en el aire de la noche. Opción primera: Joe Walker, por Dune: parte uno. Aunque en los Bafta perdió ante Sin tiempo para morir… que no es candidata al Oscar. ¿Y en los Eddie, que entrega la Sociedad de Montadores de Cine de EE UU? Pues en su apartado, drama, ganó Pamela Martin por El metodo Williams, la opción segunda. Ninguno tiene el Oscar. Puestos a pensar en la inercia de los votantes, Joe Walker, por Dune.

MEJORES EFECTOS VISUALES. En la Academia ganan aquí ciencia ficción o superhéroes. El trabajo de Paul Lambert, Tristan Myles, Brian Connor y Gerd Nefzer en Dune: parte uno pertenece a la primera categoría. Es sobresaliente y les refuerza haber ganado el Bafta y el galardón del Sindicato de Efectos Visuales.

MEJOR SONIDO. Mac Ruth, Mark A. Mangini, Theo Green, Doug Hemphill y Ron Bartlett por Dune: parte uno. Se han llevado el Bafta, el premio en su categoría de la Association of Motion Picture Sound, el galardón de la Cinema Audio Society y el Golden Reel (que entregan la sociedad de Motion Picture Sound Editors) en ese apartado.

MEJOR CORTO DE FICCIÓN. El largo adiós, del británico Aneil Karia, escrito y producio por Karia y Riz Ahmed, que además lo protagoniza… Y que ha provocado suficiente ruido en EE UU. Está gratis en YouTube, y es una gran reflexión sobre la xenofobia. Ganó en los premios del cine británico independiente. Ahora, el que acumula más premios de los candidatos en Toma y corre, de la suiza Maria Brendle, rodado en Kirguistán y centrado en matrimonios forzados.

MEJOR CORTO ANIMADO. Muy fan de The Windshelter Wiper, de Alberto Mielgo y coproducción de Leo Sánchez, pero Netflix tiene aquí un corto apoyado de forma oficial: Peti Roja, de Daniel Ojari y Michael Please. Además, tiene coproducción de Aardman, la mítica empresa británica. Esa maquinaria de promoción suena a imbatible.

MEJOR CORTO DOCUMENTAL. La ruleta rusa de esta edición. A saber. Jay Rosenblatt es un documentalista suficientemente conocido como para hacer ruido con su Cuando éramos acosadores, que apoya HBO. Los también estadounidenses Audible y Enséñame el camino a casa se pueden ver en Netflix. El afgano Three Songs for Benazir lleva una inmensa cosecha de premios previos. Y aún queda The Queen of Basketball, la increíble historia de Lucy Harris, que no solo fue la primera jugadora en meter una canasta en unos juegos olímpicos, sino que ha sido la única mujer en entrar en el draft de la NBA (cuando solo existía liga profesional masculina). Puestos a elegir, Cuando éramos acosadores, sobre el acoso escolar.