El máximo líder del grupo Estado Islámico, Abu Ibrahim al-Hashimi al-Qurayshi, fue abatido la madrugada de este jueves durante una incursión de las fuerzas especiales de Estados Unidos en el noroeste de Siria, confirmó el presidente Joe Biden.
“Anoche, bajo mi dirección, las fuerzas militares estadounidenses en el noroeste de Siria llevaron a cabo con éxito una operación antiterrorista para proteger al pueblo estadounidense y a nuestros aliados, y hacer del mundo un lugar más seguro”, informó Biden en un comunicado.
Seguidamente afirmó que “Gracias a la habilidad y valentía de nuestras Fuerzas Armadas, hemos sacado del campo de batalla a Abu Ibrahim al-Hashimi al-Quraishi, el líder del ISIS”.
Según detalló el gobierno estadounidense, el líder terrorista se hizo explotar durante el operativo, con una bomba que llevaba consigo. Biden consideró que fue un “acto de desesperada cobardía”.
Agregó que todos los estadounidenses que participaron en la operación regresaron sanos y salvos.
Al Quraishi asumió el cargo al frente de Estado Islámico tras la muerte del anterior jefe del grupo yihadista, Abu Bakr al Baghdadi, en una operación similar llevada a cabo en octubre de 2019 por las fuerzas especiales en la provincia de Idlib, cerca de la frontera con Turquía.
Amir Muhammad Sa’id Abdal-Rahman al-Mawla se cree sería otra identidad de Al Hashemi.
Tras la muerte del líder de ISIS, expresó Joe Biden, “Hemos eliminado a una amenaza mundial, se hizo explotar en un último acto de cobardía”.
Según Biden, la detonación suicida también provocó la muerte de miembros de la familia de Abu Ibrahim al-Hashimi al-Quraishi.
Según periodistas de la AFP en el lugar, la operación estadounidense tenía como objetivo un edificio de dos plantas en una zona rodeada de árboles. Parte del edificio fue destruido y se veían rastros de sangre. Los residentes de la zona dijeron que escucharon bombardeos y disparos.
(Con información de Infobae)
