La PDDH insta a las autoridades de Salud y CONNA promover la prohibición del uso de la pólvora por niños y niñas

El Ministerio de Salud registra entre el 25 y 26 de diciembre al menos 10 niños y niñas quemados, 6 de ellos entre los 6 y 9 años de edad, y los más preocupante, dos niños de tan solo un año de edad entre las víctimas, de acuerdo con datos de la PDDH.

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EL SALVADOR.- El procurador de derechos humanos, Apolonio Tobar exhortó este lunes a las autoridades del Ministerio de Salud y Consejo Nacional de la Niñez y Adolescencia (CONNA), para que promuevan la prohibición del uso de pólvora por niños y niñas en el país.

“En el marco de las atribuciones reguladas en el artículo 194 romano I de la Constitución de la República, exhorto: A) Al señor ministro de Salud, doctor Francisco José Alabi Montoya, para que coordine una campaña de prohibición del uso de la pólvora por niños y niñas, y de cara a las celebraciones de fin de año, gire las directrices necesarias a todo el personal de salud para que reporten a las autoridades competentes todos los casos de niñas y niños quemados para los efectos legales correspondientes ante el uso inadecuado de dichos pirotécnicos y petardos” se lee en parte del pronunciamiento.

Así también solicita al funcionario que entregue un informe a la PDDH sobre los planes, campañas y medidas tomadas por dicha cartera de Estado para evitar niñas y niños quemados por el uso de pólvora.

Por su parte, a la Directora Ejecutiva interina del CONNA, Maritza Haydee Calderón, “promueva decididamente la creación de una campaña para la prohibición del uso de la pólvora por parte de niños y niñas”, así como dar seguimiento que ya se conocen de niños y niñas quemados durante estas festividades.

Reitera también el llamado a las familias para que protejan a niñas y niños para evitar tragedias por el uso de la pólvora.

El Ministerio de Salud registra entre el 25 y 26 de diciembre al menos 10 niños y niñas quemados, 6 de ellos entre los 6 y 9 años de edad, y los más preocupante, dos niños de tan solo un año de edad entre las víctimas, de acuerdo con datos de la PDDH.