La incautación de paquetes de cigarrillos ha sido más frecuente en los últimos años. Sin duda, un duro golpe para los contrabandistas que afectan la seguridad nacional y pública, así como la recaudación de impuestos, el ámbito social y económico del país.
Un estudio del Departamento de Estado de Estados Unidos reveló que grupos terroristas como Al Qaeda, Los Zetas y la MS como grupo violento trasnacional financian parte de su estructura criminal incluso a partir de las utilidades del contrabando de cigarrillos.
Grupos criminales trasnacionales financian su estructuras inclusive a partir de las utilidades del contrabando de cigarrillos.
Para el director Regional para el Caribe y Latinoamérica de Crime Stopper, el contrabando del cigarrillo no es un tema que las autoridades le prestan atención, por lo tanto es más barato para los grupos delictivos organizados pasar dinero y mercadería de un lado a otro.
Pero eso no es todo, el cigarro tiene una utilidad del más del 70% para los grupos delictivos, lo que se convierte en un negocio lucrativo que llega por toneladas y contenedores desde China, Corea pasando por Panamá, Belice y después a Guatemala, por decir un ejemplo.
Pero ¿cuál es el verdadero problema?, el problema no es tanto que la pandilla o MS este vendiendo los cigarrillos, sino que el negocio de los grupos criminales sea el asegurar las rutas no solo física sino también “comprar” las voluntades legales, políticas y jueces que hacen una ruta.
El negocio de los grupos criminales es el asegurar las rutas no solo física sino también “comprar” las voluntades legales, políticas y jueces que hacen una ruta.
Por tanto, los grupos criminales ganan dinero a partir de asegurar esa ruta e inclusive posterior certificar ese paso para transitar cocaína, tráfico de personas, armas, lo que se convierte en todo un problema de seguridad.
Para poder trabajar con este y otro tipos de delitos que afectan a El Salvador y que también son de interés global, desde el 2011, autoridades de Seguridad firmaron acuerdos para implementar el programa Crime Stoppers, el cual nació hace 40 años en Estados Unidos para que la población lograra denunciar sobre hechos delictivos y contribuir así como la seguridad del país.
Asombra registrar que el 70% de la información que tiene la gente sobre hechos delictivos no se comparte con la Policía Nacional Civil, Fiscalía General de la República (FGR) u otro medio de denuncia formal por miedo y que solo el 30% llegan a las autoridades.
Es así como el programa comenzó a operar en 2012 con el apoyo de las autoridades de Seguridad, incluso los sectores claves como el privado que es dañado con el comercio ilícito.
Ocuparse del comercio ilícito, contrabando y falsificación, trata de personas, narcotráfico, lavado de dinero, pandillas, homicidios, la corrupción y los 100 más buscados, se vuelve por tanto prioridad para Crime Stoppers.
El director Regional para el Caribe y Latinoamérica de Crime Stopper, compartió que en octubre de 2016, comenzaron a trabajar el contrabando de cigarrillos, fecha desde la cual los resultados han sido importantes.
Asegura que con el contrabando los grupos criminales terminan comprando armas, teléfonos celulares, para que al final terminen extorsionando a la población.
En Crime Stopper consideran que la estructura del problema del contrabando está en las aduanas, las leyes, las políticas públicas que hay en el control.
Con el contrabando, los grupos criminales terminan comprando armas, teléfonos celulares, para que al final terminen extorsionando a la población.
Por lo que anuncian que es necesario el cambio de mentalidad de la gente, que dejen de pensar que si compra más barato es más inteligente, pues al final lo que está haciendo es financiando las pandillas que viven alrededor de ellos mismos.
“Esto es un circulo que en algún punto tiene que detenerse. Alguien que compra tiene el mismo delito que el que vende”.
“Los temas de seguridad pública no son solo temas de responsabilidad de la policía, ni de la fiscalía, todo el sistema, todo el Estado tiene responsabilidades compartidas. La población en esta caso lo que puede hacer por ley es compartir la información que tiene, no tomar manos en el asunto y formar grupos de exterminio”
Es por eso que una respuesta o un canal alternativo donde las personas pueden compartir información segura es el Programa Crime Stopper, dos formularios de denuncia que encuentran las personas en www.tupista.info y donde dejan información de manera anónima y que es de interés de la policía, al ministerio público, fiscalia y otros.
El director Regional para el Caribe y Latinoamérica de Crime Stopper ha mencionado que han crecido muchas las denuncias pues cuando comenzaron recibían cinco denuncias por semana y ahora después de cuatro años ya cuentan con un flujo de información muy grande que llega al programa y está dividido por algún tipo de delito.
“Estamos recibiendo pistas de casi todos los delitos de 100 pistas al día, muy buena información que se verifica por la policía”.
Inclusó mucha gente deja información sobre el paradero de los más buscados. “En El Salvador el programa funciona no como recompensa como en otros países sino que las personas quieran que le resuelvan el problema, la gente quiere que le quiten el pandillero que vive al lado”.
