En una foto que circula en redes sociales, se ve al mediador de la tregua entre maras y pandillas, Raúl Mijango, en cama de hospital.
El viernes pasado, fue ingresado a las 9:30 a.m. a máxima urgencia de un hospital del Instituto del Seguro Social (ISSS) según constancia médica.
El juez Especializado de Sentencia A de San Salvador, que desarrolló por cinco días la vista pública del caso tregua, ordenó que Mijango, fuera llevado al ISSS.
Fue el Instituto de Medicina Legal (IML) quien recomendó al juez que el procesado fuera trasladado a un centro hospitalario para que un médico lo examinara.
El periodista Paolo Lüers no perdió tiempo en reaccionar y criticar al que filtró la imagen, y dijo que cómo era posible que “un escuadronero tuviera la foto si solo entra a verlo la familia y amigos”.
El miércoles, el mismo juez ordenó que el imputado fuera evaluado por el IML por un supuesto padecimiento de salud del imputado. Horas después se incorporó en el juzgado con el reporte en el que recomiendan un tratamiento urgente y ambulatorio.
Desde el lunes pasado, se realizó la vista pública en contra de 17 personas acusadas de participar en la tregua. El desfile de testigos han coincidido en que Mijango introducía ilícitos en centros penales, así como influía o decidía el traslado de ciertos reos.
Por su parte, la Fiscalía General de la República (FGR) solicitó el viernes pasado la pena máxima para los imputados en el caso tregua, por los delitos de actos arbitrarios, tráfico de objetos prohibidos, agrupaciones ilícitas, falsedad ideológica e incumplimiento de deberes, todos bajo modalidad continuada. Esto durante el quinto día de vista pública.
Para Raúl Mijango y Roberto Castillo Díaz, la fiscalía pide 14 años de prisión; para Nelson Rauda, exdirector de centros penales, y Anílber Villeda, exinspector general de Centros Penales, solicita 18 años de cárcel.
La Fiscalía solicita también 14 años para 5 exdirectores de penales, y seis años para los 9 miembros del Consejo Criminológico.
