Un joven salvadoreño de 22 años es acusado de asesinar a una adolescente musulmana cuando salía de una mezquita
El joven fue identificado como Darwin A. Martínez Torres y fue detenido el domingo y acusado el lunes en Virginia de asesinar a una adolescente musulmana que fue atacada cuando salió a buscar algo de comida durante una pausa en la sesión nocturna de rezos en su mezquita el sábado en la noche.
Martínez Torres fue procesado en el Tribunal de Menores y Relaciones Domésticas del condado de Fairfax y permanecerá detenido sin fianza hasta el 19 de julio cuando comparezca ante la corte.
De acuerdo con comunicados de la policía y de la mezquita, la adolescente y sus amigas caminaban de regreso a la mezquita de Dulles, conocida como ADAMS por sus siglas en inglés, luego de comprar en un restaurante de comida rápida, en el área de Sterling cuando el joven se les acercó en el auto y comenzó el incidente.
De acuerdo con el canal WRC-TV en Washington, la jovencita se cayó cuando las demás corrieron y no se percataron que no estaba con ellas.
Sin embargo la versión del Washington Post dice que Martínez empezó a discutir con un adolescente en una bicicleta y luego condujo su vehículo sobre una acera, dispersando el grupo de hasta 15 jóvenes, sin razón aparente, persiguió con un bate de béisbol a los jóvenes, pero alcanzó y golpeó a Nabra Hassanen, de 17 años; luego la secuestró en su automóvil, dijo la Policía de acuerdo a la publicación.
Mientras la policía buscaba a la jovencita el domingo, un oficial marcó el alto a un auto cuyo conductor se veía sospechoso y quien después fue identificado como Martínez. En ese momento fue detenido.
Los investigadores dijeron a los padres que el sospechoso golpeó a su hija en la cabeza, la subió al automóvil y después la arrojó al agua.
“Estamos devastados y con el corazón roto al ver que nuestra comunidad tiene que pasar por ese traumático evento”, dijo el centro musulmán en un comunicado. “Es un momento en el que tenemos que estar unidos para rezar y cuidar de nuestros jóvenes”, agregó.
Sin dar más detalles, la policía del condado de Fairfax tuiteó el lunes que no estaban investigando “este asesinato como un delito de odio”.
