Después de 5 días de lucha y sosobra, la familia del menor hondureño Antonio Martínez que supuestamente había “resucitado” se dispuso a darle el último adiós, este insólito caso ocurrió en El negrito, Yoro, Honduras.
Según el relato del padre del menor, el niño fue enterrado en horas de la madrugada ya que el cuerpo comenzaba a externar mal olor y el estómago del niño se comenzó a “inflar”, por lo cual optaron por enterrarlo ya que podía enfermar a los demás miembros de la familia.
El niño falleció el pasado viernes, pero cuando familiares y vecinos se disponían a enterrarlo, el cadáver del menor reaccionó lo cual causó admiración y esperanza en todos los habitantes de la zona.
Luego de eso, según el relato de los vecinos el niño moría y reaccionaba varias veces, todo esto en el lapso de 5 días hasta que finalmente los padres decidieron enterrar del todo el cuerpo del niño.
Algunos vecinos desmienten la versión de la familia del menor, alegando que no lo han enterrado y que lo han escondido, otro caso curioso es que en horas de la madrugada desconocidos pusieron un pañuelo y una rosa que se está derritiendo, muchos asumen que esta es una señal que el niño no quería ser enterrado.
