¿Quieres abundancia en tu vida? Sigue estos consejos

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La vida es grande si tus ojos así lo ven. “Ser más que parecer”. La vida está hecha de pequeños momentos y de pequeñas decisiones. Cada una de estas decisiones se debe realizar con amor y de manera consciente. Esto incluye ver al mundo con ojos de abundancia.

De ahí que puedas apoyarte de rituales para lograr subir la frecuencia, y energía a un nivel más alto y positivo.

Los rituales de abundancia son una forma de entrenamiento para la mente ya que  ayudan a sentirnos plenas y satisfechas con lo que somos.

Si haces estos ejercicios con devoción te ayudarán a conectarte con tu ser interior. La idea es que se conviertan en parte de tu rutina diaria.

Los 5 rituales que guiarán tu vida hacia la abundancia

#1 Agradece

Toma consciencia de todas las oportunidades y bendiciones que hay en tu vida. Recuerda que tienes la obligación, ante la vida, de entregar de vuelta y aprovechar al máximo aquello que recibes.

Agradece todas esas pequeñas cosas que tienes; reconoce y conecta con la energía de agradecimiento.

Cuando agradecemos abrimos nuestro corazón. Reconocer nuestra divinidad, nuestro ser y quienes somos, nos ayuda a sentirnos mejor y a conectar con una frecuencia energética más alta que nos hace atraer más bendiciones a nuestra vida.

Haz este sencillo ejercicio: Cada mañana escoge 5 o 10 cosas por las que te gustaría agradecer y escríbelas en tu diario o en un trozo de papel: “agradezco por este día, porque tengo un lugar donde dormir, por la comida, etc”.

Cuando agradeces, la vida empieza a fluir y se abren más oportunidades.

#2 Entrega

Entregar no quiere decir que tienes que donar algo material; la entrega también es dar amor, honestidad, amistad, sinceridad, lealtad…

Sólo te pertenece aquello que estás dispuesta a dar. Por ejemplo, si tú no estás entregando honestidad, lealtad, justicia, esto nunca llegará a tu vida porque estás bloqueando esa energía.

Es común que pienses: ¿Qué pasa si yo entrego y no recibo nada de vuelta?

Debes entender que cuando entregas algo, debes de hacerlo sin esperar nada a cambio.

Haz a un lado el egoísmo; ve por el mundo con generosidad, con toda la actitud de amor, positivismo y abundancia. Ten la seguridad de que la vida te va a proveer también.

Pero que quede claro que dar no significa permitir que pasen por encima de ti. Tienes que ser muy consciente al proteger tu energía y tu espacio. Es importante aprender a mantener tus límites para no desgastarte y lograr encontrar un balance.

Haz este ejercicio diariamente: Busca algo que puedas dar;  “una sonrisa a tu vecina, una linda palabra, un cumplido a la persona que desees”.. Entrega algo que te salga del corazón, algo que ayude a elevar la frecuencia del mundo.

#3 Observa tus pensamientos y creencias

Cuando lleguen a ti pensamientos, palabras o cualquier comentario, expresión, etc., tómalo y analiza si esas creencias son verdaderas y si son para tu bien. Si no lo son, deséchalas.

Haz este ejercicio: Observa las creencias y los pensamientos que tienes. Intercepta todo lo que entre por tus cinco sentidos y fíltralo: quédate sólo con todo lo bueno.

#4 Sé consciente de cada momento: mindfulness y meditación

Uno de los rituales que debes hacer todos los días es, estar consciente de tu vida, de lo que decides, de lo que escuchas a tu alrededor y de lo que está entrando en tu mente; al mismo tiempo debes de meditar para estar en el aquí y en el ahora. Cuando lo realizas estás conectando con tu esencia y esto te permite manifestar cosas increíbles.

Cuando logras esto, te conectas con tu campo de potencialidad y logras crear tu realidad.

Meditar es uno de los rituales más importantes, pero si te cuesta realizarlo puedes buscar un texto que te inspire, una canción o algo que suba tu frecuencia.

Para este ritual te recomendamos realizar un ejercicio que consiste en meditar 10 minutos antes de dormir: cierra los ojos y visualiza aquello que quieres como si ya lo tuvieras -un trabajo nuevo, estar más saludable, una relación nueva-.

Hacerlo justo antes de quedarte dormida es muy poderoso, porque es el momento en el que te conectas con tu espíritu, con Dios y con tu fuente.

#5 Conéctate con algo más grande que tu

Muchas veces te pierdes en el día a día y en los problemas cotidianos; y pierdes la percepción de que hay algo mucho más grande que tú.

Puede que decidas conectarte con la colectividad, con la Madre Tierra, Dios o el Universo, pero acuérdate de que existen cosas maravillosas y que son más grandes que tú. Todo esto te conecta con tu divinidad y contigo misma. Recuerda que eres un vehículo; un canal directo para dar vuelta al mundo y esto también te llevará directo a la abundancia.

Todos somos abundantes en nuestra esencia y en nuestro espíritu, porque somos una creación divina perfecta. Ya tenemos todo para ser felices, todo en la naturaleza nos conecta con nosotras mismas y todo está unido.