Una niña y una adolescente fueron víctimas de delitos sexuales en su contra, en dos hechos diferentes pero similares.
En el primer caso la niña fue agredida sexualmente por casi tres años por parte de su padrastro, que aprovechaba la ausencia de la madre mientras se encontraba trabajando para cometer el delito. En el segundo caso una adolescente fue persuadida por un vecino para que lo visitara en su casa, esta accedió a ir y el sujeto la violó, dejándola en estado de embarazo.
Ambos casos fueron probados por la Unidad de Delitos Relativos a la Niñez, Adolescencia y la Mujer en su relación familiar de la oficina fiscal de Soyapango.
El padrastro de la niña, identificado como Yoni N. fue condenado a 16 años de cárcel, por el delito de agresión sexual en menor e incapaz en su modalidad continuada, en perjuicio de su hijastra de cinco años.
En la declaración de la niña se supo que comenzó a agredirla desde los cinco años. El imputado tocaba a la víctima en sus partes íntimas, y en otras ocasiones le colocaba su miembro sobre las partes íntimas de la niña, acciones que el imputado realizó en horas de la noche y el día, declaró la niña sin recordar fechas exactas, través de Cámara Gesell.
Por su parte, José Balmore Hernández Amaya, el vecino de la adolescente, fue condenado a 14 años de prisión, luego de ser declarado culpable por el delito de violación.
Según la declaración de la adolescente, a finales del mes de marzo de 2016, el imputado la invitaba constantemente a su vivienda ubicada en una colonia de Ilopango, ella accedió y estando dentro de la casa el sujeto la forzó a sostener relaciones sexuales; producto de las cuales quedo embarazada. Ante la noticia de su estado se interpuso una denuncia ante la Fiscalía General de la República (FGR), luego se procedió a la captura de Hernández.
