Salazar Romero reconstruye centro escolar de Ilopango

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Muchos centros educativos del sistema público se encuentran en condiciones poco favorables para el buen aprendizaje de la población estudiantil, tal era el caso del Centro Escolar la Cima II, en el municipio de Ilopango, San Salvador; la cual presentaba deterioro en el techo, paredes, en las instalaciones del sistema eléctrico y además necesitaba la construcción de un muro. Esta realidad pudo cambiar gracias a la intervención de la constructora privada Salazar Romero.

Salazar Romero no solo cambió la infraestructura del centro escolar, sino también transformó la tristeza en sonrisas en cada uno de los alumnos y alumnas.

Manos a la obra, la constructora reparó totalmente el techo, la instalación eléctrica, la edificación del muro de seguridad que era necesario en la institución, se colocó ventanas y se remozó todo el lugar.

“El centro escolar estaba en condiciones bastantes dañadas, especialmente en la parte del techo y obviamente no podían recibir las clases hoy en invierno”, expresó uno de los participantes de la obra de reconstrucción por parte de la empresa privada.

El presidente de la compañía, Raúl Salazar, dio un mensaje de esperanza a los alumnos y a sus padres y les reiteró que los empresarios están para ayudar a su país, a las nuevas generaciones, porque creen en el presente y futuro de la nación.

Los maestros de dicho centro escolar dijeron sentirse agradecidos por la reconstrucción del centro de estudios. “Antes la realidad era otra cuando llegábamos a los salones, la infraestructura en la que se encontraba y hasta cierto punto los estudiantes también se desmotivan en muchas ocasiones, pero estamos muy contentos y agradecidos por esta ayuda tan grande que han dado a la institución”, expresó una docente de dicho centro educativo.

Por su parte los estudiantes también manifiestan su agradecimiento. “Estamos muy agradecidos con Salazar Romero por hacernos el muro, ya so va meter gente extraña a la escuela, no teníamos electricidad, cuando llovía no veíamos las clases (…) gracias a ellos ya hay electricidad, (…) gracias a ellos ya tenemos techos y ya vamos a recibir nuestras clases muy bien”, expresó emocionada una estudiante.