La armada nuclear enviada por Trump a Corea del Norte tomó rumbo contrario

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La flota que Estados Unidos anunció que se dirigía a la península de Corea siguió la dirección contraria y se dedicó a maniobras conjuntas con Australia relata hoy en una nota el periódico El País.

Los almirantes, el secretario de Defensa y hasta el presidente. La Administración Trump ha vivido hoy uno de los momentos más bochornosos de sus 89 días de vida, al descubrirse que la disuasoria flota nuclear que supuestamente se dirigía a la Península de Corea para mostrar los dientes al régimen de Pyongyang, nunca tomó esa dirección, sino que navegó en la contraria.

El esperpento, que se ha mantenido durante 10 días sin rectificación y ha sido finalmente destapado por medios estadounidenses, no sólo enloda a la cúpula militar, incluido el secretario de Defensa, Jim Mattis, sino que pone en duda el rigor de su estrategia en uno de los conflictos más volátiles y delicados del planeta.

El 11 de abril, el antiguo teniente general Mattis confirmó públicamente la misión, y al día siguiente el propio presidente insistió en que se había “enviado a una poderosa armada”. La posibilidad de un ataque preventivo se agigantó.

El mundo empezó a temblar, todo cuadraba, excepto un detalle. El portaaviones, según The Washington Post y The New York Times, se hallaba en aquel momento a 5.600 kilómetros de la Península de Corea y navegaba en dirección contraria, concretamente hacia el Índico para participar en unas maniobras conjuntas con la marina australiana. Nada se habría sabido, si no fuera porque la propia Armada hizo públicas este lunes una serie de fotografías tomadas el día anterior del barco cruzando el Estrecho de la Sonda, entre Java y Sumatra. A más de 5.000 kilómetros de su teórico destino.

Ahora, algunas fuentes militares han señalado que no se corrigió a tiempo el itinerario de la flota, prefijado para las maniobras conjuntas, y otras han indicado que se quiso dar tiempo a China para que presionara a Corea del Norte. En cualquier caso, el portaaviones, esta vez sí, se dirige hacia la Península de Corea. Y llegará a su destino la semana próxima. Supuestamente.