EL SALVADOR.- El pasado lunes 14 de enero de 2019 fue un día sangriento en el territorio nacional, cerró con 26 muertes violentas, entre ellas las de dos agentes de la Policía Nacional Civil (PNC), uno en San Luis Talpa y otro en Tonacatepeque.
De acuerdo con el subcomisionado Jaime Chinchilla el repunte de homicidios se atribuye a una estrategia de las pandillas de elevar la cifra de muertes previo a las elecciones presidenciales.
“El incremento de la violencia en los últimos días se debe a la cercanía del evento electoral y por una amenaza histórica de las pandillas, que se recrudeció desde hace tres años, de atentar contra los agentes de seguridad pública” aseveró el policía.
Ante situación de violencia, asegura que se ha recomendado a los empleados reforzar medidas de protección personal y de sus familiares, asimismo, explicó que los agentes pueden acceder a un protocolo de emergencia cuando consideran que enfrentan una amenaza real, pero que en el caso de los últimos tres policías asesinados en lo que va del año, la alerta no fue activada.
Chinchilla manifestó que todas las probabilidades se han estado valorando, entre ellas el acuartelamiento de policías. “Esperamos no llegar a un nivel más grave de lo que ya está” indicó.
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