Mourinho le da lección a Zidane y los diablos rojos derrotaron a los merengues 2 a 1

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Los penaltis no favorecieron al Real Madrid ante el Manchester United. En el primer tú a tú entre Zidane y Mourinho, los blancos cayeron derrotados ante los rojos que tuvieron mejor acoplamiento, en la International Champions Cup.

En los 90 minutos solo se rescata la magia de Luka Modric y la ilusión de los jóvenes. Bale se nota que no podrá ser timonel en el grupo que aunque algunos no estén de acuerdo, sigue dependiendo de la presencia de Cristiano Ronaldo, su desmarque y sus goles.

Muchos creen que los blancos no lo necesitan, pero hoy lo resintieron.

Se notó la falta de rodaje en los madridistas frente a un equipo más entero -era el cuarto encuentro de pretemporada para los ‘Red Devils’-, pero los blancos, que saludaron cariñosamente a su exentrenador José Mourinho justo antes del pitido inicial, ofrecieron una buena imagen, aunque también evidenciaron que están lejos aún de su mejor estado de forma.

El joven francés Anthony Martial con una espectacular jugada que dio origen al gol de los británicos. Martial, con una marcha más que el resto, recorrió la línea de fondo y se deshizo de hasta tres jugadores blancos (Carvajal, Modric y Lucas Vázquez) antes de entregar la pelota a Jesse Lingard para que anotara a placer en el minuto 46.

El tanto llegó justo en la recta final de una primera parte donde Modric, con su increíble visión de juego, demostró que el 10 a la espalda le sienta de escándalo.

Su juego, repleto de fantasía y velocidad, fue la nota más destacada para los de Zidane más allá de los detalles de Marcelo, que impresionaba al público con sus gestos técnicos, y de Isco, con más ganas que efectividad.

En la segunda parte, Zidane apostó por cambiar a todo su equipo y dar minutos a los más jóvenes y permitir el debut de Theo Hernández con la camiseta blanca.

Mourinho hizo ocho cambios tras el descanso y hasta un noveno apenas unos instantes después, ya que Ander Herrera se retiró del campo en el minuto 51 con un golpe en la cadera.
El empate llegó poco después tras un pase excepcional de Kovacic que sirvió para una galopada de Theo, derribado en el área por Lindelof. Casemiro no perdonó y puso las tablas en el marcador.

Ese resultado mandó el partido a la tanda de penaltis, donde el Manchester se alzó con la victoria.