Elecciones en Chile: Dura derrota para Piñera y una nueva generación política redactará la nueva Constitución

Si bien aún no hay datos definitivos, el presidente Sebastián Piñera reconoció que la doble jornada de elecciones ha dejado un mensaje "claro y fuerte" a su Gobierno.

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La elección más grande en la historia de Chile celebradas este sábado 15 y domingo 16 de mayo, culminó con una derrota del Gobierno de Sebastián Piñera, el desplazamiento de los partidos tradicionales y el surgimiento de una nueva generación política, nacida al fragor del estallido social de 2019, que ahora tendrá un papel protagónico para redactar una nueva Constitución.

Los chilenos eligieron a 155 miembros de la Convención Constituyente, 345 alcaldes, 2.252 concejales y 16 gobernadores regionales. En total eran más de 22.000 candidatos que se disputaron 2.678 cargos.

Una de las principales expectativas estaba puesta en la Convención, ya que este nuevo órgano cambiará la Constitución que todavía rige en el país heredada por la dictadura que Augusto Pinochet encabezó durante 16 años (1974-1990).

Piñera y sus aliado se quedaron lejos de su meta y los candidatos independientes se llevaron una gran victoria

Con el 100 % de las mesas escrutadas, Vamos por Chile, la coalición de derecha que representaba al oficialismo, obtuvo 38 escaños. La apuesta de Piñera y sus aliados era conseguir por lo menos 52, ya que ello le permitiría tener derecho de veto, pero quedó muy lejos de su meta.

Las alianzas de los partidos de izquierda, representadas en las listas Apruebo Dignidad y Lista del Apruebo, se quedaron con 27 y 25 puestos cada una.

No obstante, los victoriosos fueron  los candidatos independientes, entre los que destacan feministas, ambientalistas y defensores de derechos humanos que no tenían trayectoria partidaria ni experiencia en cargos de elección popular, pero que se erigieron como los ganadores al obtener una mayoría de 48 espacios.

A ellos se suman los representantes de los pueblos indígenas chilenos (mapuche, aimara, rapa nui, quechua, atacameño, diaguita, colla, chango, yagán y káwesq), que ya tenían reservados 17 escaños.

De esta forma, la nueva Constitución chilena será redactada en su mayoría por sectores progresistas en un país que dejó atrás al conservadurismo que lo identificó durante varias décadas, aunque como ningún sector alcanzó mayoría absoluta, estarán obligados a buscar consensos en cada uno de los artículos.

Si bien aún no hay datos definitivos, el mandatario chileno Sebastián Piñera, reconoció que la doble jornada de elecciones ha dejado un mensaje “claro y fuerte” a su Gobierno, cuestionando su gestión.

“No estamos sintonizando adecuadamente con las demandas de la ciudadanía”, dijo. 

El presidente reconoció que la jornada fue “histórica” y dijo que su deber como gobernante es “escuchar con humildad y con atención el mensaje de la gente”.