Aunque Zidane retuvo la tentación de hacer rotaciones y repitió el once erigido como titular en la semana fantástica, la sensación del deber cumplido después de haber solventado una situación límite es inevitable y la versión del Madrid que tocó fue con una marcha menos, sin ideas para convertir en ocasiones el dominio que le tuvo que ceder el Athletic tras la expulsión de Raúl garcía antes del cuarto de hora.
Aun así, tanto rondó el Madrid el área de Unai Simón en la primera parte que, casi al descanso, Kroos se animó a disparar desde fuera del área y consiguió un gran gol para poner por delante a los de Zidane.
Con un jugador y un gol más, llegaron minutos de indolencia de los blancos y el Athletic, que no le perdió la cara al partido pese a las inclemencias, empató al inicio del segundo tiempo tras una galopada de Capa que culminó él mismo tras la primera parada de Courtois. Casi como un acto reflejo, el Madrid volvió a atacar con intención, pero con la misma carencia de ideas de todo el partido. Más por empuje que por ideas, camino al cuarto de hora final, llegó un gol de Benzema de cabeza cuando la desesperación empezaba a llamar a la puerta. Tras un asedio inesperado, de nuevo el francés sentenció en el descuento entre el cabreo de Zidane.
Un hombre menos
La salida del campo de Raúl García a los 13 minutos, después de tres entradas casi seguidas en las que llegó tarde y golpeó sin medida, cambió por completo el partido. El Athletic ya no pudo encimar a los blancos en su campo para forzar los errores que fueron su sustento en el tramo inicial.
El Madrid pasó a dominar de forma abrumadora, pero llegó la media hora de partido sin haber disfrutado de ocasiones de gol, sin que Unai Simón hubiera tenido que intervenir. Casi sin obligaciones defensivas, la necesidad de crear fútbol expuso las carencias de los de un Madrid que transcurrió por el partido sin ideas creativas en ataque. Esa sensación se extendió más allá de la hora de partido, pese a los cambios de Zidane.
Tras el gol de Benzema, el tramo final fue un ataque a la desesperada del Athletic que hizo sufrir al Madrid, con un jugador menos, hasta el final, con paradón de Courtois incluido ya en el descuento, antes del gol final.
