Patricia y Misty Spann fueron arrestadas luego de que una investigación de la Agencia de Protección Infantil descubriera que más que pareja, se trataba de una relación incestuosa entre una madre y su hija.
Aunque suena horrible, se pone peor al saber el precedente: Patricia Spann perdió la tenencia de sus tres hijos cuando estos eran todavía pequeños. Sin embargo, cuando crecieron, ella se propuso tenerlos de vuelta, pero de una manera retorcida.
Tras retomar el contacto, logró seducir a su único hijo varón y empezaron una relación incestuosa. En 2008 lo convenció para que se casaran, vínculo que fue anulado 15 meses después. Asqueado, el joven denunció lo ocurrido y se alejó definitivamente de su madre.
Pero esto no detuvo a la desequilibrada mujer. En 2014 comenzó a frecuentar a su hija Misty, que entonces tenía 23 años. Al poco tiempo, iniciaron un vínculo amoroso.
Se casaron en marzo del año pasado, en Stephens, Georgia. La madre logró engañar a las autoridades con un documento en el que figuraba como Patricia Ann Clayton.
Misty confesó el delito de incesto y fue condenada este martes a 10 años de prisión. Su madre rechazó haber cometido un crimen, así que será enjuiciada a partir de enero.
